Guillermo Vezzosi vive en la localidad entrerriana y resultó elegido para asistir a la Bienal Kommagene en Turquía. Informó que su proyecto fue seleccionado entre 200, de 41 países del mundo, y que es el único de Argentina. Una de sus obras será exhibida próximamente en el centro cultural La Vieja Usina.

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El artista visual de Cerrito, Guillermo Vezzosi, participa desde este viernes de la  2ª Bienal  Kommagene en Turquía, que se inaugurará oficialmente el 24 de agosto y estará en exhibición hasta el 8 de noviembre de 2024. Desde el 9, los artistas comenzarán a trabajar e instalar sus proyectos.

La bienal, titulada “Rising”, realizó una convocatoria internacional de proyectos, de los cuales se presentaron 200 propuestas de 41 países, habiendo seleccionado a 27 artistas de distintos puntos del mundo, 18 artistas de Turquía y 9 de la región de Adiyaman. Vezzosi remarca que es el único artista de Argentina y participa con el proyecto titulado Renacimiento: un ritual para sanar junto a la Madre Tierra.

Para el entrerriano, la asistencia a la bienal es un logro importante en su carrera y formación artística, que comenzó, según informa, como autodidacta, visitando talleres de distintos artistas,  entre ellos, el del maestro Luis Felipe Noé.

Vezzosi nació en Santa Fe en 1984, estudió arquitectura y vive en Cerrito desde el 2013. Dice que se siente cerritense y que desde este lugar de Entre Ríos comenzó  a viajar y exponer, primero en importantes Museos y Centros Culturales de Argentina y luego empezó a ser seleccionado e invitado para exponer en otros países.

En septiembre, una de sus obras se instalará en el Centro Cultural y de Convenciones La Vieja Usina de Paraná, dependiente de la Secretaría de Cultura de Entre Ríos.

El tema

La bienal convocó proyectos que se enfoquen específicamente en el terremoto que sucedió el año pasado en Turquía.  Sobre su obra, el artista de Cerrito explicó que encaró un trabajo Land Art -corriente del arte contemporáneo que utiliza materiales de la naturaleza-, que “se constituirá en un ritual para invitar a las personas a sanar las heridas abiertas que dejó el terremoto de 2023”. La obra estará confeccionada con telas doradas obtenidas de los remanentes de la producción de fábricas locales y también telas donadas por los habitantes de la región, las cuáles se emplearán para rellenar las grietas abiertas que dejó el terremoto. A su vez, se invitará a la población a escribir mensajes en las telas.